Alejandro Sanz ya estaba calentito. Tras su disertación sobre el origen de Luisiana que tanto dio que hablar, no iba a dejar pasar ni una más en Twitter. Y tanto. La bomba estalló ayer y la mecha la prendió un simple desliz ortográfico. El cambio de una 'b' por una 'v' -o una 'n', según el artista- supuso un adiós momentáneo a la red social donde atesora dos millones de seguidores que consultan a diario sus andanzas.
Todo empezó cuando Sanz quiso rendir homenaje a los afectados por el terremoto de Lorca. Entonces algunas voces críticas le acusaron de «aprovechado» y «oportunista». Hasta ahí todo tranquilo. El guirigay se desencadenó cuando el artista respondía a uno de sus defensores diciendo: «Es vergonzoso de verdad. Buestra propia gente». Comenzó entonces la avalancha de 'tuits' arremetiendo contra su mala ortografía... hasta que Alejandro Sanz dijo basta.
«Hoy -por ayer- decido que dejo de escribir en Twitter. Hay un grupo de gente que me están culpando de haber escrito 'vuestra' con 'b' cuando no es verdad, solo para dejarme en ridículo. Lo que yo escribí es 'nuestra gente', pero estoy harto de tanto ataque y tanta falacia, tanta mala baba y tanto esfuerzo para darle vida a gente sin alma, sin cultura y sin corazón. Leeré los 'tuits' de mi gente y escribiré a quien quiera, pero no pienso seguirle el juego a tanta gente sin corazón. Adiós y que ardan». Unas horas después decidió incumplir su amenaza... pero puso algunas condiciones: «Seguro que no me van a echar de Twitter cuatro envidiosos, pero me lo voy a tomar con mas calma. Tengo otras cosas que hacer». Aun así, su Twitter ya no es lo que era.
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