Algunas personalidades son reconocidas por sus muy obvios distintivos faciales o corporales.
Sin ánimo de sonar superficial, se dice que la belleza interior es lo que vale, pero a fin de cuentas, todo entra por los ojos, y mucho más cuando se trata de algo imposible de ignorar o disimular con los trucos del maquillaje. A lo largo de la historia, ciertos personajes se destacaron por sus innegables rasgos físicos y no hicieron nada por cambiarlos, por el contrario, supieron explotarlos e introducirlos en el gusto del público.
“Defectos” interesantes que valen millones. ¿Quién podría pensar en Ringo Starr y Barbra Streissand sin sus peculiares narices? ¿Quién podría ignorar la pequeña estatura de Danny De Vito o la cuadrada estructura del rostro del Terminator Schwarzenegger? Y es que unas cuantas personas en este planeta son dueñas de un distintivo especial que les otorga la impronta esencial para destacarse sobre otras.
Desde el tristemente célebre Adolf Hitler, cuyo perfil y bigote son reconocidos incluso por los más jóvenes, hasta políticos como el Che Guevara, con una frente y un bigote únicos en su forma, son también icono de imitación por parte de muchos admiradores. Un caso totalmente diferente es el del desaparecido Michael Jackson, quien en su continua búsqueda de la perfección cambió su fisonomía hasta parecer otro. El resultado devastador de sus múltiples cirugías hizo que los medios de comunicación tomaran el aspecto de su nariz como referente inmediato de su carrera. Asimismo, la cantante Cher empezó y siguió una larga cadena de intervenciones estéticas con el afán de “limar” ciertas asperezas de su natural belleza resultante de su ascendencia indígena.
Otras, en cambio, llevan la cuestión a medias y prefieren convivir con esos dotes que la madre naturaleza les prodigó. Por ejemplo, aunque ya retocada, Madonna jamás alteró la evidente estética de su dentadura, mientras que Luis Miguel se rindió a los tormentos del espejo.
Enrique Iglesias también se deshizo de su visible lunar en el rostro, gracias a los ruegos de su novia, la tenista Anna Kournikova.
En contraposición, la súper modelo Cindy Crawford supo sacarle el jugo a su marca de nacimiento hasta convertirla en un símbolo sexual, como en su época lo había hecho la bella Marilyn Monroe. Muchos dicen que hay que aceptarnos tal cual somos y que hay que conformarse con lo que Natura nos dio, y en el mundo de los flashes, ese dicho lleva un acento mayor, si no, basta con averiguar las cuentas bancarias de los insatisfechos de Hollywood.
200 millones de dólares, es el valor en que la cantante Jeniffer López aseguró su famoso trasero.
Los otros defectos de la fama. Las arrugas del rebelde Mick Jagger, la boca del dulce Steven Tyler, los ojos del fantástico David Bowie, el busto de Dolly Parton, la “calva” del romántico Phil Collins, las graciosas orejas de Will Smith, la zigzagueante nariz de Owen Wilson y otras tantas imperfecciones de los famosos son atractivos naturales que reditúan importantes sumas en sus cuentas, diciéndoles un tácito NO a los cirujanos.
LOS QUE APARENTABAN SER NATURALES. Así como algunos se operan para deshacerse de aquello que les atormenta y les pone en evidencia, otros disimularon bien sus defectos con la ayuda del bisturí y los hicieron pasar como algo que los acompañó desde su nacimiento. Elvis Presley y Marilyn Monroe, cada uno en sus respectivas épocas, se sometieron a la terrible rinoplastía para dar un mejor perfil a sus legendarias efigies.
Los perfectos desperfectos de famosos
Muchas estrellas han sido reconocidas por algunas marcas naturales que les brindaron identidad propia y les abrieron las puertas de la popularidad.
Los más reconocidos son aquellos que no pasaron por las manos de los cirujanos para cambiar su apariencia, con la salvedad de aquellos que decidieron clamar el auxilio del mágico bisturí.
2000 Las prominentes caderas de Jeniffer López llamaron la atención del mundo. La artista aseguró su trasero.
1990 Cindy Crawford enloqueció a todo el mundo con su lunar cercano a los labios, que incrementó su sex-appeal.
1980 En esa década, Madonna fue criticada por la separación entre sus dientes delanteros, que la artista ignoró.
1970 En estos años, la cantante Cher destacó por sus rasgos exóticos por su ascendencia indígena y armenia.
1960 Barbra Streissand se hizo famosa por su notoria y larga nariz. La artista nunca se animó a una cirugía.
1950 El aún desconocido “rey del rock”, Elvis Presley, se sometió a una cirugía de nariz para afinarla.
1950 Marilyn Monroe se destacó por exhibir y remarcar el sexy lunar que tenía en una de sus mejillas, cerca de su boca.
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